Los glúteos son una de las partes del cuerpo que más complejos provoca y es uno de los músculos que más cuesta tonificar. El gran éxito del efecto “push up” en bañadores y pantalones es una muestra del gran interés, tanto en hombres como en mujeres, por tener unos glúteos definidos y tonificados. Más allá de las tablas de ejercicios físicos existe la opción de la cirugía: la gluteoplastia o cirugía de glúteos.
La gluteoplastia es un procedimiento quirúrgico para aumentar el volumen y mejorar la forma de los glúteos, en algunos casos, o eliminar el exceso de piel y de grasa en la zona, en otros. A continuación, explicamos en qué consisten las diferentes técnicas de gluteoplastia y en qué casos es mejor optar por una o por otra.
¿Qué es el glúteo y qué imperfecciones suele presentar?
Para entender qué es una gluteoplastia es importante conocer el punto del cuerpo en el que se lleva a cabo. El glúteo es una estructura formada por tres músculos -el glúteo mayor, el mediano y el menor-, por grasa subcutánea y por la piel. Y como cada persona es diferente, no todos los glúteos son iguales.
Los glúteos pueden ser pequeños, con poca proyección -el denominado culo plano-, pueden tener imperfecciones -oquedades en los laterales por el envejecimiento o por grandes pérdidas de peso-, puede estar caído -por falta de actividad de los músculos en la mayoría de ocasiones- o puede tener mucha piel sobrante.
Tipos de gluteoplastia
Existen tres técnicas de gluteoplastia y el cirujano optará por la más adecuada en función de las características físicas de cada paciente. Es importante confiar en profesionales con años de experiencia en este tipo de intervenciones, poniéndonos en sus manos desde el momento de preparar la cirugía.
Gluteoplastia con prótesis o implantes
La gluteoplastia o aumento de glúteos con prótesis o implantes es la técnica más conocida y habitual. Este procedimiento consiste en aumentar el volumen del glúteo mediante una prótesis que se coloca, a través de una incisión, entre los glúteos mayor y mediano. La cicatriz queda escondida entre ambos glúteos y no se nota.
Este tipo de cirugía permite dar volumen, sobre todo, en la parte superior del glúteo. Para ello se utilizan prótesis biodimensionales de silicona adaptadas a las características del glúteo, y suelen ser diferentes para los hombres y para las mujeres.
Los hombres suelen decantarse por los implantes con forma oval cuando desean mantener las características masculinas y preservar la depresión trocantérica -hendidura entre el muslo y el hueso de la pelvis-. En cambio, quienes escogen implantes con forma redonda se inclinan más por unas formas más femeninas.
En el caso de las mujeres, la elección depende de la cantidad y del tipo de tejido adiposo-grasa corporal- que presenten. Las prótesis redondas ofrecen una mayor proyección del glúteo, pero si el tejido adiposo de la paciente es muy fino es recomendable optar por implantes con forma ovalada para que no se perciban con el movimiento.
Uno de los grandes inconvenientes de esta técnica de gluteoplastia es que no permite cambiar la forma del glúteo. Si una persona tiene el glúteo alargado, hundimientos o ciertas imperfecciones, con una prótesis es muy complicado poder corregir estos defectos.
Gluteoplastia con lipoescultura
La gluteoplastia con grasa autóloga -propia- o con lipoescultura consiste en la extracción de grasa de diferentes zonas donantes del cuerpo de la paciente -por ejemplo caderas, abdomen, cintura o espalda- para, una vez procesada, infiltrarla en los glúteos. El objetivo es proporcionar volumen y mejorar su aspecto. Al poder escoger en qué parte se infiltra más o menos grasa, el cirujano puede cambiar o corregir imperfecciones del glúteo.
Los pacientes que optan por esta técnica suelen padecer flacidez cutánea, sobre todo en los casos en los que ha habido una pérdida considerable de peso, aplanamiento y descolgamiento de la piel en esta zona. Este tipo de cirugía no deja marcas porque se realiza a través de pequeñas incisiones de muy pocos milímetros de longitud.
También es importante aclarar que la grasa extraída, purificada e infiltrada se mantiene toda la vida y no se reabsorbe. El inconveniente de este tipo de intervención es que no se puede realizar en personas que están muy delgadas y que, por tanto, no tienen zonas con acumulación de donde extraer la grasa.
Gluteoplastia con reconstrucción corporal
La gluteoplastia con reconstrucción corporal o con colgajos es una técnica muy especial que permite aumentar y dar forma al glúteo en personas que tienen mucha piel sobrante.
Se suele reservar este tipo de técnica en personas que por el paso de los años o por una pérdida masiva de peso han perdido volumen y sus glúteos han caído. En estos casos, el cirujano, además de proyectar el glúteo, utilizará la piel sobrante en la parte alta del glúteo para mantener y dar volumen.
Dependiendo la zona que presente el exceso cutáneo o las incorrecciones, las incisiones se harán en la zona del pliegue superior del glúteo o en el pliegue inferior. Es una técnica compleja que requiere de una gran experiencia para ser realizada.
¿Por qué recurrir a SmartClinic para una gluteoplastia?
Los cirujanos que te atenderán en SmartClinic se pondrán en tu lugar desde el primer contacto y te plantearán las mejores opciones en cada caso. Te acompañarán en el preoperatorio y el posoperatorio, además de practicar la gluteoplastia adecuada en función de tus peticiones y necesidades. La confianza es esencial en estos casos, por eso contamos con doctores altamente formados y capacitados para practicar la cirugía que necesitas.